Es considerada una formación geológica única en el mundo de la edad Precámbrica ubicada en el municipio Río Negro.
Tiene una superficie de 15 hectáreas en la que se permite realizar excursiones, turismo de ecología y la observación de distintos tipos de aves como los llamados gallitos de las rocas o Rupicola rupicola.
Es de difícil escala por lo liso y empinado de sus piedras. La única forma de llegar es en avioneta hasta el poblado de San Simón del Cocuy y luego solo por vía fluvial desde San Carlos de Río Negro siguiendo el curso del río Negro.
Para ir a este sitio se recomienda llevar ropa cómoda, abrigos para la noche, repelente para insectos. Aún no se han establecido horarios para la visita a este monumento natural Venezolano.
Paola Gutiérrez/Prensa Tierra de Gracia
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